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17 de Diciembre del 2001

Columna 32

A través de los años la gente ha hecho un montón de preguntas sobre el corredor de la muerte y la pena capital. Quería coger algunas de las preguntas más comunes y contestarlas, aunque ya he hablado de estas cosas antes. Las he seleccionado al azar y aquí hay solo unas pocas. Quizás más adelante pueda responder más.

Una pregunta muy habitual es cómo paso los días. Ha habido un par de cambios en los años que han pasado desde que escribí por primera vez del tema. Muchas veces me paso toda la noche despierto, escribiendo, así que a menudo veo empezar el día. Hacia las 5 de la mañana está todo muy tranquilo, a menos que haya alguien gritando o dando golpes en las rejas de la puerta. He hablado antes de cómo meten aquí en el corredor también a otros presos (que no están condenados a pena de muerte). Normalmente son estos presos (la mayoría con problemas mentales) los que hacen esos ruidos. A veces duran toda la noche. Entre las 5 y las 5.30 de la mañana se empieza a oír actividad delante del bloque de celdas. Es cuando a los presos de la otra parte (de la parte principal de la prisión) les traen la comida de la mañana. Así que se escucha el ruido de los cacharros y las sartenes. Entre las 5.30 y las 6 de la mañana, el primer grupo de guardas aparece y empiezan a reunir los carritos de la comida y se escuchan más cacharros y sartenes. Cuando está todo preparado para servir la comida, el guarda viene y abre las portadas de acceso (son puertas correderas) de todas las celdas. Entonces llega el guarda con la comida y la sirve. Sobre las 6 de la mañana el segundo grupo de guardas viene y te sirve la bebida. Después se recoge la basura.

Alrededor de las 7 de la mañana empiezan lo que se llama ‘la salida al patio’. Es cuando llevan al patio a los presos que quieran salir. Antes de que les dejen salir al patio, tienen que desnudarse y les registran la ropa, luego pasan en ropa interior llevando la ropa en la mano. Les permiten a los presos usar el patio (hay 6 patios: 5 para los condenados y 1 para los que están en el Agujero) hasta cerca de las 11 y media de la mañana, que es cuando tienen que volver a las celdas. Cada preso es escoltado por un guarda cuando va al patio o vuelve a la celda.

Los que no van al patio, pasan el rato haciendo otras cosas. Muchos trabajan en sus apelaciones, u otros problemas legales varios. Otros hacen trabajos artísticos, como pintar o dibujar. Otros ven la tele, o leen. Depende de lo que quiera hacer el preso con su tiempo.

Nos permiten 3 duchas a la semana. Cada sección tiene dos duchas, que son celdas convertidas donde han quitado la cama, el lavabo y el retrete y han puesto baldosas y una ducha. Cada vez que salimos de la celda (por cualquier razón) nos ponen las esposas y un guarda nos escolta, incluso para ducharnos.

Sobre las 10 de la mañana, uno de los guardas (cada sección tiene asignados dos guardas) nos reparte bolsas de papel. En la bolsa normalmente hay algo de pan y de una misteriosa carne. Es el almuerzo. Para la 1 a casi todo el mundo lo encierran en la celda el resto del día, menos a los que quieren darse una ducha, si han estado en el patio ese día. Hay también algunos que tienen una visita todavía a esa hora.

De lunes a viernes, se permiten visitas legales. Estas visitas son las de tu abogado, o de alguien que quiera trabajar en tu defensa legal. De jueves a sábado, podemos recibir las que se llaman ‘visitas regulares’. Son las visitas de los familiares, parientes, etc. Hasta mayo del 2000, nos permiten las visitas en una habitación grande, de 8 de la mañana a 1.30 de la tarde, pero cambiaron el procedimiento por una pelea en la sala de visitas. Instalaron unas jaulas (parecen casetas de perro) y te permiten recibir a las visitas en ellas durante un par de horas, pero normalmente son menos porque los guardas no van a por ti hasta que tu visita no esté sentada en la jaula. Así que una visita de 2 horas es de una hora y media en realidad.

Entre las 2.30 y las 3.30 p.m. el guarda de la Sección (a las 2 p.m. hay otro cambio de guardas) reparte el correo que llega (normalmente, la prisión tarda de 2 a 4 semanas en darnos el correo) Cerca de las 5 p.m. el guarda de la Sección (hay un guarda después de las 2 p.m.) reparte la comida de la noche. Para los que preguntáis qué tipo de comida nos dan, es normalmente comida que puede ser hecha para un gran número (6000) de personas. Así que hay un montón de judías, y arroz, y fideos. Cosas así. Después de la comida nocturna y la recogida de basura, se acaba el día hasta que repartan la comida a la mañana siguiente. Así que como podéis ver, un día aquí no es gran cosa. Cada día es básicamente lo mismo, a menos que los guardas hagan un registro de las celdas o si hacen un cierre por algún motivo. Cuando llegué aquí, habría un encerramiento quizás cada año o cada dos años. Ahora parece que es una cosa semanal. Uno de los chicos contó cuántos días estuvimos encerrados en el 2000 y fueron casi 140 días.

Otra pregunta que me han hecho muchas veces es cómo son los guardas. Según mi experiencia, la mayoría de los guardas sólo quieren entrar y hacer su trabajo con los mínimos problemas posibles y volver a casa. Hay algunos guardas a los que les gusta hacernos pasar un mal rato, pero la mayoría no son así. También hay algunos que son bastante decentes, considerando las circunstancias. La mayoría de los problemas parecen venir de los que no son guardas normales. Los ‘Supervisores’ si queréis. A veces parece que les gusta salirse de su cometido y hacer las cosas más complicadas y difíciles. Quizás es así cómo justifican su trabajo. Creando problemas para poder resolverlos. La típica parte burócratica de las cosas.

También me preguntan si podemos trabajar. No, no trabajamos. El corredor de la muerte es básicamente una zona de segregación administrativa, o Ad Seg, como lo llamamos aquí. Es sólo un nombre bonito para el ‘Agujero’. Ad Seg es la zona de encerramiento, o área de alta seguridad, así que los movimientos de los presos están restringidos por rezones de seguridad y no nos permiten trabajar.

Otra pregunta es si tenemos ordenador y e-mail. No, no nos permiten tener ordenadores. Podemos comprar una máquina de escribir, si el individuo tiene dinero para comprársela. Pero no hay ordenadores ni Internet, ni aquí ni en la parte normal de la prisión. Puede que haya algunas excepciones para los presos normales, pero no sé cuáles son. Quizás si tienen un trabajo en la cárcel que lo requiera, pero sería la única razón que se me ocurre.

No he podido contestar muchas de las preguntas, así que intentaré volver a escribir pronto y contestar más. Quizá quede redundante, pero son las preguntas que más me hacen. Así que hasta la próxima, cuidaos.

Paz,
Dean